Tuve una visión.

Vi a un hombre, aunque no podía verle el rostro. Parecía estar en una misión. Caminaba por un caminoestrecho, un sendero llamado Paz, que se extendía tan lejoscomo los ojos podían ver.

A pesar de la lluvia, el granizo, las tormentas o cualquier desastre que azotara al mundo, nada podía desviar a este hombre, este ser increíble, de ese camino. Día y noche, caminaba sin cansarse. Su única fuente de fuerza era el poder de Jehová Dios.

El camino estaba hermosamente iluminado, bendecido por nuestro Creador. Como ráfagas de viento maligno, el mal lo perseguía. La lujuria y la fornicación intentaron atacarlo, perorebotaban sin poder tocarlo. Chismes y calumnias lo acechaban, pero también eran rechazados. Ningún mal podía alcanzarlo.

¡Qué hombre! ¡Qué ser! Él siguió firme, sin desviarse, caminando en rectitud. Espíritus malignos se burlaban de él, lo escupían, mentían sobre él. Pero no podían mentirle, porque élno se movía, no se rendía. Siguió caminando por el senderorecto y angosto.

Asesinos lo buscaron. Rameras y fornicadores ofrecieron sus frutos corruptos. Pero él siguió caminando. Día y noche, sin detenerse.

Mientras caminaba, unos pocos —muy pocos entre millones— se unieron a él. El mal también los atacó, pero no pudo penetrarsu bondad. El mundo se sumergía en el caos. Pero entonces, una falsa paz llegó al mundo. Sin embargo, los pocos no se distrajeron; continuaron caminando con él.

Después, la paz se desvaneció. El mundo entró en una época de gran tribulación. Nación contra nación. Familias divididas. La guerra de la humanidad llegó a un fin destructivo.

El hombre llegó al final del camino llamado Paz —recto y angosto. Habló, y toda criatura, desde el ser humano hasta los animales, lo escuchó. El mal —sí, ese mismo mal que lo habíaatacado— comenzó a huir.

Ese hombre en el camino… era Jesús. Entonces todo cobrósentido. Aquellos pocos que estaban con Él en el camino fueronescogidos por Él, incluso antes de que lo supieran.

Aunque no somos perfectos como Jesús, debemos caminar con Él. Él nos dará paz en nuestra jornada hacia la verdad y la justicia. Nada podrá resistir Su poder.

YHWH tiene un plan.

No importa cuán caótica sea tu vida: a través de Cristo Jesús puedes salir adelante.

Una vez escuché a un hombre decir que había vendido su alma, pero ¡no estoy de acuerdo con eso! ¿Cómo puedes vender algo que no te pertenece? Señor, perdona la necedad de tales palabras, que vienen del mal en el hombre.

Tú, Señor, mostrarás a todos que Tú eres el Alfa y la Omega.
¡Alabanza y gracias a Ti!